Una de las cosas que hace que las personas sean infelices, es la avaricia o el deseo de obtener siempre más. Cuando te fijas siempre metas materiales y compensas carencias de tu vida solo con cosas materiales, no estás siendo feliz realmente. De hecho, la adquisición de bienes, propiedades o artículos materiales, solamente te proporciona una felicidad momentánea. Al transcurrir del tiempo te seguirás sintiendo vacío. 

Por otro lado, existen personas que se obsesionan en adquirir bienes o cosas materiales, por el simple hecho de que quieren sobresalir de los demás o demostrar cosas que realmente no son. No hay nada más vacío y que llene de infelicidad que esto, aunque no lo creas. 

La verdadera felicidad es alcanzar sueños, metas, disfrutar de las pequeñas cosas de la vida, y sobre todo compartir con quiénes amas.

Muchas personas, a raíz de esto llevan a cabo un estilo de vida minimalista o practican el estoicismo, en donde se busca vivir solo con lo verdaderamente necesario. Esto aplica para todos los ámbitos, tanto en tu hogar, como tu ropa y pertenencias. 

Ese dinero que ahorras al dejar de gastar en cosas innecesarias, puedes utilizarlo para viajar, para crear ese proyecto que tanto quieres, entre otras cosas que te llenen el alma y te llenen realmente de felicidad. 

Lo material es tan solo eso, material, no te da felicidad y si te la da es momentánea. Llegará un momento en tu vida cuando te preguntes que has hecho en todos los años que has vivido y lo material pasará a un segundo e incluso, un tercer plano. 

Así que preocúpate por alcanzar metas, disfrutar de la vida sin depender de las cosas materiales y verás como poco a poco aprendes a ser feliz de verdad.